Para todo surfista viajar es parte de su naturaleza y claro Adela Recordón no es la excepción la que nos cuenta de su Surf trip de varios meses, entrenando en una academia y surfeando. Así está viviendo esta surfista oriunda de Pichilemu, sus días en tierras Australianas y nos trae su relato de lo que ha sido su viaje por las playas de «Nemo».
Hola a todos, estoy en Australia. Un mes llevo aquí y me quedan 2 más. Estoy en la costa Este, en el Pacífico Norte, dónde empieza la gran barrera de Coral, las más extensa del mundo. Ahí dónde a Nemo se lo llevaron en una bolsa plástica a un acuario en la sureña ciudad de Sidney. Esta es la famosa Gold Coast, en el estado de New South Wales justo en la frontera con Queensland, dónde la naturaleza y el hombre han hecho el lugar soñado para el surf.
Estoy entrenando en un centro de alto rendimiento muy exigente y profesional, así como todo en este país. Surfeo mañana y tarde combinado con clases teóricas y preparación física especializada, con camas elásticas, videos, stop motion. Al fin del día termino demasiado cansada y sin tiempo para nada más. A esta escuela, todos los fines de semana, vienen profesionales a hacer sus camps. Este fin de semana me tocó surfear con «Chippa Wilson», una máquina de los aéreos, súper buena onda, de gran estilo y bastante reservado.
Australia es el país del “to share”, dónde todo se comparte en forma respetuosa entre la gente y con la naturaleza; sin dañar, sin invadir, sin prejuicios y con una lógica muy diferente a lo que estamos acostumbrados en Chile y Latinoamérica. La gente es muy amorosa trabajadora y cariñosa, muy alejados de esa frialdad que supuestamente tienen los países colonizados por Ingleses.
Los paisajes y naturaleza de Australia son como su animal el ornitorrinco (pico de pato, cola de nutria, ovíparo pero da de mamar a sus crías, tiene pelos y plumas y tiene unas garras como los queltehues pero venenosas). Así es Australia. Atmosfera como en Patagonia, playas tropicales, bosques valdivianos pero con especies semitropicales, fresco en la noche y muy esquicito en el día. Hay tremendos bosques de eucaliptus que forman ecosistemas vivos, con Koalas y Chucaos que cantan como Bandurrias, cientos de variedades de loritos, casi no existen las nubes, casi no llueve pero hay mucha vegetación exuberante, ríos y lagos preciosos. Y muchas otras cosas increíbles. Aire puro, luz diáfana, todo brilla y no hay polvo.
Australia es el país del respeto, todo es ingenioso, práctico y sin tratar de impresionar a nadie.
Por el momento estaré enfocada en mis entrenamientos y en Octubre de aquí me iré a un Pro-Junior en Chicama, Perú y después a una fecha del tour Nacional de Chile en Isla de Pascua.
Estoy viviendo un sueño y gran parte se lo debo a mi pasión por el surf, a mi familia y a Roxy. Gracias a ellos por el tremendo y fundamental apoyo, pronto les contaré más
Adela