No es ninguna novedad que las colillas de cigarro son tan basura como un pedazo de papel tirado al suelo. Sin embargo, para poca gente es algo «malo» apagar el cigarrillo en el piso y dejarlo ahí tirado. Ante esto, la universidad San Diego State University en EE.UU. investigó y concluyó que estas colillas son mucho más tóxicas de lo que nos imaginamos, al ser una mezcla entre el plástico del filtro y los restos de lo fumado.
Pero el principal descubrimiento fue el perjuicio de estas colas a los peces, tanto de agua salada como dulce. Explican que una colilla en un litro de agua podría matar al pez que ahí estuviese en 96 horas, debido principalmente a los residuos, al alquitrán y a otras partículas que se mantienen en el filtro, que no es biodegradable (como sí el tabaco después de un tiempo).
Es muy triste que aún no haya conciencia extendida respecto de lo perjudicial de esta basura, que es la número uno, o sea la basura más encontrada tirada en los suelos, arena, mar, etc. Así que para los que fuman, ojalá la próxima vez que vayan a botar un cigarro lo piensen dos veces y opten por apagarlo y botar la colilla junto con el resto de los residuos, en un basurero.
Fuente: KPBS