Típico que cuando llegan las nuevas guías de teléfonos del año uno no sabe qué hacer con la antigua o simplemente la bota a la basura. Pero si se analiza hacia atrás todo lo que involucra ese enorme mamotreto de hojas, se concluye que sería un gran aporte medioambiental el reciclarlo.
Cada guía equivale a una gran cantidad de libros, en cuanto a su número de páginas, es decir, a una gran cantidad de árboles talados, además de toda la tinta utilizada. Por ejemplo, en promedio, si se reciclaran 500 guías telefónicas, se estaría contribuyendo a salvar entre 17 y 31 árboles. En algunos países estas guías ya son hechas a partir de papel reciclado o a partir de elementos restantes de la industria maderera, como el aserrín.
Por eso, aunque en Chile aún no tengamos mecanismos de reciclaje particularmente de estas guías, sería un gran aporte que cuando se acaba la vida útil de las guías se las entregaran a algún centro de reciclado o a personas dedicadas a recolectar papeles y cartones.

Fuente: Blog Verde