Si bien se han monitoreado constantes marejadas estos meses, la competencia tendrá una nueva fecha límite en busca de las mejores olas con mayor periodicidad y magnitud, que permitan a los competidores surfear las gigantescas paredes de agua.
El director de Lobos Por Siempre, Patricio Mekis comentó sobre esta extensión del tiempo de espera. “Mirando las condiciones actuales del mar y los pronósticos, hemos decidido volver a Bandera Roja y seguir esperando una mejor marejada ya que el swell que viene este sábado 12 de julio no reúne las condiciones necesarias para tener todo un día de competencia. La buena noticia es que extenderemos el periodo de espera hasta el 15 de agosto”. Seguimos esperando a lo que los morros (geografía de Punta de Lobos) digan, comentó Mekis.
El evento comenzó su periodo de espera el 15 de abril y, como cada año, reúne a los y las mejores surfistas nacionales e internacionales. Punta de Lobos ofrece un espectáculo único en nuestro país, con olas que pueden sobrepasar el porte de una casa de tres pisos. Familias, fanáticos del surf y la comunidad local vibran con este campeonato que también busca resaltar la cultura de Pichilemu y fomentar la sostenibilidad, a través de proyectos de conservación que protegen el borde costero, fortaleciendo el vínculo entre el deporte, la naturaleza y la comunidad.
Entre los surfistas invitados destacan los/as nacionales: Dominique Charrier, Natalia Escobar, Héctor Vargas, Alejandro Fuenzalida, Reinaldo “Chacha” Ibarra, Cristian Merello, Diego Medina, Ramón Navarro (campeón defensor) y muchos más. Entre los internacionales destacan: Kohl Christensen de Hawái, Justine Dupont de Francia, Katie McConnell de Estados Unidos, Paige Alms de Hawái, Tony Laureano de Portugal, Landon McNamara de Hawáii (actual campeón del Big Wave Eddie Aikau de Hawái), entre otros.
Lobos Por Siempre es un evento inédito en Latinoamérica y no es solo una competencia de Surf. Es una iniciativa organizada por el Parque Punta de Lobos como parte de su estrategia de sostenibilidad y conservación activa del territorio. Más que un evento de olas grandes, es una plataforma para visibilizar la importancia de proteger este anfiteatro natural, promover la participación comunitaria y fortalecer una cultura de mar respetuosa y consciente.





















